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¿Cómo funciona exactamente el contrato fijo discontinuo y qué lo diferencia de un contrato temporal?

[/vc_column_text][vc_single_image image=»793″ img_size=»full» label=»»][vc_column_text]Desde la aprobación por parte del Gobierno de la Reforma Laboral se ha multiplicado el uso del contrato fijo discontinuo por parte de las empresas. Desde Cardellach & Panadés te resolvemos las dudas que puedas tener.[/vc_column_text][/vc_column][/vc_row][vc_row][vc_column][vc_column_text]

Tipología de contratos

La desaparición del contrato por obra y servicio ha sacudido el mercado laboral español. Desde la entrada en vigor de la reforma laboral a finales de 2021 se ha reducido la tipología de contratos a las 4 siguientes:

  • Contrato indefinido
  • Contrato de duración determinada
  • Contrato fijo discontinuo
  • Contrato de prácticas

A diferencia del extinto contrato de obra y servicio, tan solo se podrá recurrir al contrato de duración determinada o temporal en situaciones muy concretas (sustitución, periodo de prueba, por ejemplo). Además, la duración será máximo de seis meses o ampliable a un año si así lo recoge el convenio colectivo.

Muchas empresas cuentan con una actividad sujeta a la estacionalidad, con lo que precisan de trabajadores para periodos muy concretos del año. Dadas las restricciones de uso del contrato temporal, la opción que queda a los empleadores es el uso del contrato fijo discontinuo[/vc_column_text][/vc_column][/vc_row][vc_row][vc_column][vc_column_text]

¿Qué es el contrato fijo discontinuo?

El contrato fijo discontinuo es un tipo de contrato indefinido diseñado para la realización de un trabajo en una empresa con carácter intermitente. Está especialmente pensado para actividades laborales que tienen lugar durante una época concreta que se repite anualmente y para la cual está prevista el aumento puntual de la plantilla. Un hotel que necesita refuerzo en periodo estival, o un comercio que precisa de más personal durante las navidades serían ejemplos de esta situación.

La principal diferencia con el antiguo contrato de obra y servicio o con el de duración determinada es que el contrato fijo discontinuo tiene la condición de indefinido, con las diferencias que ello comporta a nivel legal. Los trabajadores contratados de esta manera forman parte de la plantilla de la empresa pese a no trabajar durante todo el año en ella. Esta condición les otorga el derecho a ser llamados al año siguiente cuando vuelva a ser necesario el refuerzo de personal. 

Otra diferencia clave es la antigüedad. A un trabajador fijo-discontinuo se le contabiliza la antigüedad total desde el momento del contrato, y no solo los meses en los que desarrolla su actividad dentro de la empresa. [/vc_column_text][/vc_column][/vc_row][vc_row][vc_column][vc_column_text]

¿Qué situación laboral tiene el empleado el resto del año?

Pese a existir por escrito una relación recurrente entre trabajador y empresa, la relación laboral se finiquita cada vez que finaliza el periodo de trabajo. En este finiquito se le abonarán al empleado las vacaciones generadas y no disfrutadas. No se le compensará con una indemnización ya que la relación laboral sigue existiendo, aunque queda suspendida hasta el año siguiente.[/vc_column_text][/vc_column][/vc_row][vc_row][vc_column][vc_column_text]Si necesitas un servicio especializado en asesoría laboral, en Cardellach & Panadés somos expertos en derecho laboral. No dudes en contactar con nuestro equipo de expertos para resolver cualquier consulta que puedas tener.[/vc_column_text][/vc_column][/vc_row]